¿Estuviste en la Atlántida? 7 señales de que estuviste allí (y cómo recuperar tu don)

¿Estuviste en la Atlántida? 7 señales de que estuviste allí (y cómo recuperar tu don)

¿Alguna vez has sentido nostalgia profunda por un lugar que no recuerdas haber visitado? ¿Esa sensación de "echar de menos tu hogar" aunque estés sentada en tu propio sofá?

No estás sola. A lo largo de mis lecturas de Registros Akáshicos, he encontrado a muchos alumnos con un origen común: La Atlántida.

Somos conocidos como Corazones Blancos. Llegamos a esta encarnación con un propósito y unos dones específicos que, tras la caída de aquella civilización, quedaron dormidos u olvidados por el trauma de la separación.

7 señales de que tu alma recuerda la Atlántida

• Conexión profunda con el agua: El mar te sana, te calma y sientes que te "limpia" de una forma casi mágica. El agua te recarga.
• Fascinación por los cristales: Te atraen los cuarzos y las piedras, y sabes intuitivamente cómo usarlos para sanar o amplificar energía sin que nadie te lo haya enseñado.
• Sensibilidad a la tecnología y la energía: Entiendes que todo es vibración. A veces te abruma la densidad del mundo moderno, pero, aun así, tienes una facilidad natural para comprender cómo fluye la energía.
• Dones innatos de sanación: Tus manos se calientan al tocar a alguien o intuyes dónde le duele a una persona sin que te lo diga.
• Sentimiento de "misión interrumpida": Sientes un peso, una culpa difusa o la sensación de que "no pudiste salvar algo" en el pasado, o que tienes que completar una tarea importante.
• Sueños vívidos: Ciudades de cristal, templos blancos, tecnologías de luz o catástrofes relacionadas con el agua aparecen en tus sueños como si fueran recuerdos.
• Búsqueda de la Unidad: Te cuesta entender la competitividad agresiva o la separación. Tu alma recuerda la vida en comunidad, la armonía y la conexión total con la Fuente.

Si has dicho "sí" a varias de estas señales, es muy probable que tu don original siga vivo dentro de ti, aunque esté latente.

La buena noticia es que no tienes que cargar solo con la nostalgia. A través de los Registros Akáshicos podemos viajar a ese espacio-tiempo, recuperar la memoria de quién eras y traer ese talento a tu vida presente, poniéndolo al servicio de tu felicidad.